PEDRO Y CORNELIO
Algunos dicen
que todas las religiones son iguales y son buenas. Que a Dios se puede llegar
por distintos caminos, lo importante es creer en Dios.
Otros dicen: si
creemos en Dios, hacemos buenas obras, nos portamos bien y no le hacemos mal a
nadie, eso es suficiente para alcanzar la salvación.
Déjeme decirle
que las dos ideas son equivocadas. Estas
ideas quedan totalmente desvirtuadas en la historia de Cornelio, en el
capítulo 10 de los Hechos de los apóstoles. Esta historia nos demuestra que es
necesario ir al conocimiento de Cristo, creer en él y recibirle para poder participar
de la salvación.
En este texto de
Hechos 10 hay dos palabras clave, CREER
Y RECIBIR. Creer en Cristo y recibirle.
Los personajes
principales en este relato bíblico, son Pedro y Cornelio.
*Pedro era un
judío cristiano lleno de prejuicios todavía…él había observado toda
su vida las costumbres y tradiciones judías, tenía unos esquemas muy arraigados
que no sería tan fácil quebrarlos de la noche a la mañana. En esta visión, Dios
le enseña cosas nuevas y le usa como mensajero para llevar el mensaje de salvación
a Cesarea, a un hombre llamado Cornelio y a todos los que estaban con él, que
eran gentiles.
*Cornelio era un
centurión, (un oficial) del ejército romano: pagano de
nacimiento, pero religioso,
simpatizante del judaísmo. “Era piadoso y
temeroso de Dios con toda su familia. Hacía obras de misericordia y oraba continuamente.”
v.2. Esto le agradaba a Dios,
PERO,…era necesario hacer algo más que eso para ser salvo: debía conocer a
Jesús. Entonces, como en los tiempos antiguos, Dios le envía en visión un ángel
mensajero a Cornelio con instrucciones precisas.
*Hechos 10:1-8, Cornelio y el
ángel de Dios: Vimos la descripción de quién era Cornelio, su condición
espiritual y moral. Que Dios escuchó sus oraciones porque venían de un corazón
sincero. Sin embargo, sus oraciones y sus limosnas, no bastaban para asegurar a
Cornelio la paz y el gozo de la salvación.
Dios le envió
una revelación sobrenatural, a fin de llevarle al conocimiento del Salvador,
quien le puede perdonar y transformar.
El ángel no vino
a anunciarle el mensaje de la salvación a Cornelio; vino a darle instrucciones sobre
lo que tenía que hacer para recibir la salvación. El “anuncio” del evangelio es
misión de los discípulos y hoy es de nosotros los creyentes hombres y mujeres salvados,
no de los ángeles.
*Observemos
también a Pedro ante esta visión tan especial: Hechos. 10:9-16. El se encuentra en ayuno y oración, en un momento
de comunión íntima con el Señor; momentos especiales en los que Dios suele manifestarse.
La visión de Pedro: “El cielo se abrió, y descendió un gran
lienzo, tendido por las cuatro esquinas, lleno de animales cuadrúpedos,
reptiles y aves de toda clase.”
También oyó algo: la voz
de Dios. “Pedro, mata y come.” En un principio Pedro no
comprende; esta visión le produce un conflicto interior, porque lo que Dios le
pedía hacer, según veía Pedro, era lo contrario de lo que le indicaba su religión.
Aquí Dios le pide romper los esquemas de
la ley antigua, del viejo pacto y empezar a actuar según el nuevo pacto de la
salvación por gracia en Cristo.
*Dios le
enseña a Pedro dos cosas:
1-Que él había
purificado todos los alimentos. Porque
después de establecido el nuevo pacto y la iglesia, Dios anuló la restricción
de los alimentos. Marcos 7:18-19 “¿No entendéis que todo lo de fuera que entra
en el hombre, no lo contamina, porque no entra en su corazón, sino en el
vientre, y sale a la letrina? Esto decía, haciendo
limpios todos los alimentos.”
2-Le enseña que la
salvación es para todos; que Dios ya no hace distinción entre judíos y gentiles;
que la salvación es por gracia a todos los que la quieran recibir.
*Pedro y los
mensajeros de Cornelio, Hechos 10:17-23:
Aquí el Espíritu Santo le ayuda a Pedro a relacionar el mensaje divino con la
realidad presente. En otro tiempo un judío jamás entraría un gentil a su casa
y mucho menos tratándose de un soldado del ejército romano que eran odiados por
los judíos.
Pedro entonces,
fue con los mensajeros, no por la invitación de Cornelio en sí, sino porque el
Espíritu Santo le convenció. Note aquí mi amado lector, que Pedro recibe el mensaje
de Dios mismo, por el Espíritu Santo que ya mora en él como creyente.
Ya en casa
de Cornelio, Pedro entiende bien la visión: versículos 28 y 29:
“Y les dijo: Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón
judío juntarse o acercarse a un extranjero;
pero a mí me ha mostrado Dios que a ningún hombre llame común o inmundo;
por lo cual, al ser llamado, vine sin replicar. Así que pregunto: ¿Por qué
causa me habéis hecho venir?”
*Pedro en la
casa de Cornelio, versículos 30-33: Cornelio narra la visión a Pedro, el
motivo de su llamado.
Si continuemos leyendo,
vemos la disposición y alegría con que Cornelio espera a Pedro, hay un sincero y
profundo deseo por escuchar el mensaje y había reunido a toda su familia y amigos en
su casa para que también ellos recibieran el mensaje que traía Pedro.
*Finalmente,
los resultados del mensaje entregado:
a) Vemos que la
salvación que hay en Cristo, tiene carácter universal.
b) Que el
mensaje es divino: Cristo JESÚS es nuestro Salvador en este mundo y será el
Juez en la eternidad.
c) Que todos
pueden recibir el perdón de los pecados por la fe en Cristo.
d) Que Dios
derramó su Espíritu sobre los gentiles como evidencia divina de su conversión,
y los nuevos creyentes se bautizaron para dar testimonio de su Fe.
e) Al recibir el
Espíritu Santo, son transformados.
f) Que es el Espíritu
Santo el que produce la vida nueva en el creyente, le inspira, lo sustenta y le
guía.
Dios
les bendiga.
Orfilia
Miranda L.